Hector y el rinoceronte blanco eran los mejores amigos del mundo. Vivían juntos en la selva y compartían todo, desde las comidas a las aventuras. Un día, decidieron explorar una nueva parte de la selva y encontraron una cueva oculta. Al entrar, vieron una extraña nave espacial.
Hector y el rinoceronte blanco se subieron a la nave y se sentaron en sus asientos. De repente, la nave se encendió y comenzó a volar. Los animales no sabían qué estaba pasando, pero estaban emocionados.
La nave voló por todo el universo y visitaron lugares increíbles. Finalmente, aterrizaron en un planeta desconocido. allí, conocieron a unos extraterrestres que les pidieron que les ayudaran a luchar contra un malvado villano.
Hector y el rinoceronte blanco aceptaron y, juntos, consiguieron vencer al villano y salvar el planeta. A partir de entonces, se convirtieron en héroes intergalácticos y continuaron visitando y ayudando a otros planetas.