Una fábula con moraleja
Margarita y el cordero vivían en la misma granja. Un día, el cordero tuvo hambre y Margarita tenía una zanahoria. Él le pidió a Margarita que le diera la zanahoria, pero Margarita se negó. El cordero tuvo que comer hierba.
La moraleja de esta fábula es que debemos ser compasivos y ayudar a quienes nos necesitan.